Por fin líderes, hemos tardado ocho jornadas y siete partidos en recuperar lo que nos quitaron con la cacicada-sanción de la primera jornada, pero después de todo estamos donde debemos y terminaremos el año como “campeones de invierno”. Objetivo conseguido derrotando este domingo a un “líder” que ya llevaba tres derrotas (que ya son cuatro).
El partido fue relativamente sencillo, con los únicos peros del segundo cuarto, la excesiva dependencia ofensiva de Toribio y el recurrente y pésimo porcentaje en tiros libres (en esta ocasión un pobre 4/10). Arrancamos el partido como una moto, apoyados una vez más en una defensa individual que sigue atragantándose a los rivales y en el acierto de Toribio, con 10 puntos casi consecutivos, anotados casi todos ellos desde la misma posición (ya sabéis, puerta atrás, asistencia y canasta cómoda, debe ser la canasta más repetida de la historia de los juegos deportivos municipales), un acierto al que apenas añadimos un par de contraataques. En definitiva, desde el primer cuarto con la barrera de los diez puntos rota y un 17-4 de parcial.
El segundo cuarto representa nuestra peor actuación defensiva en lo que va de temporada. Una zona 3-2 mal ejecutada, con un boquete evidente que fue perfectamente aprovechado por el rival para (añadiéndole algo de acierto en el tiro exterior) anotar 16 puntos y llevarse el parcial de ese segundo cuarto. Afortunadamente, la pájara defensiva no se vio acompañada de otra similar en ataque y los 13 puntos anotados nos permitieron mantener el colchón de la decena de puntos.
Tras el 30-20 al descanso y la seria advertencia del segundo cuarto, volvimos a la individual y con ella a la eficacia defensiva: sólo cuatro canastas en juego y un total de 10 puntos encajados en toda la segunda parte. En esa tesitura, que el ataque no funcionase especialmente bien (Toribio aparte) no supuso obstáculo alguno para ir consolidando una nueva victoria sin apuros, que llegó al final a los 20 puntos de diferencia, 50-30.
Terminado el partido y casi la primera vuelta, se van confirmando las impresiones de las primeras jornadas y son cada vez más claras las posibilidades de acabar primeros de grupo, podemos estar satisfechos de la actitud general del equipo, de la predisposición defensiva (algo sorprendente conociendo al equipo y su trayectoria en los últimos años) y del manejo del banquillo que, aparte de la solidez que parece habernos dado, ha evitado algunos problemas entre compañeros que veníamos arrastrando en las últimas temporadas. También reseñable es que en 7 partidos disputados aun no nos hayan señalado ninguna técnica.
Visto lo visto, el jugador de la jornada sólo puede tener un nombre, 29 puntos de 50 y con un segundo anotador con sólo 7 puntos en su haber, no dejan lugar a dudas, Toribio repite tras la pasada jornada y esta vez en solitario.
(Aunque está pendiente de la aportación de Isra, no quiero dejar pasar esta crónica sin decir algo de nuestro escandalosamente espectacular cocido navideño y dar las gracias a nuestro cocinero el Sr. Rubio, y es que pocas veces puede uno comer siete platos de una sentada y que ninguno desmerezca al anterior. Y otra cosa Monsters, siempre es una gozada compartir momentos con vosotros)
Y ya para ir cerrando, toca video, una vez más con un jugador histórico, en este caso casi una fuerza de la naturaleza, porque en este deporte ha habido aleros finos, sutiles, potentes, fuertes y muy fuertes, pero sólo uno como él, señoras y señores, con ustedes ¡¡¡¡Sir Charles Baaaaaarkley!!!!... otra brutal gozada...
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