Empezamos con dudas, con el abandono de Aluche después de muchos años y un amargo debut con la absurda sanción a Pozo y un arranque en negativo. Al mismo tiempo teníamos jugadores nuevos y la primera experiencia con un entrenador y una mínima disciplina para el equipo. Los resultados son, objetivamente y por mucho que las valoraciones personales de cada uno puedan ser dispares (que cada cual es libre de elegir y utilizar sus propios parámetros), muy positivos, acabar la liga regular como campeones, por primera vez en muchos años, y con una sola derrota real, no permite un juicio distinto.
A partir de aquí, llega el momento de las felicitaciones: La primera, como no, al equipo en su conjunto, por el esfuerzo y el compromiso, así como por el buen ambiente. La segunda, al entrenador, por lidiar con todos, ser capaz de imponer sus criterios (obligándonos, entre otras cosas a pasar minutos y minutos defendiendo al hombre) y por lo resultados, claro. Y la tercera, para los de siempre, Toribio y Javierjaver, leit motiv y alma del equipo.
Como cada año, cerramos la temporada con la participación en el torneo Marca, aunque en esta ocasión con la novedad de la inscripción de dos equipos (en parte obligados por un exceso de jugadores y por algunos roces al final de la temporada – que nada está libre de defectos – y en parte ayudados por algunas nuevas incorporaciones, que habrá que ver si son temporales o permanentes): El primero, como no, La Familia Monster, con nuestro flamante entrenador, Pepe, y con los jugadores más destacados del equipo, especialmente los citados Toribio y Javierjavier, siempre titulares indiscutibles y máximos anotadores en las últimas temporadas (por no decir en todas, claro), a los que se unieron algunos de los nuevos, como Edu Sabas, Carlos o, sobre todo, Iván. Y el segundo (que no por ello menos importante) los Monsters, con varios de los habituales de los últimos años como Sergio, Gus o Paco, amén de destacados refuerzos como Jerry (jr y sr) o Simón.
Los resultados de ambos equipos han sido destacables y han superado las espectativas: El primero por superar como era de esperar, la fase de grupo y pasar dos rondas más, hasta rozar las semifinales cayendo con toda dignidad ante un equipo claramente de otra división.Y el segundo, sin llegar tan lejos, por superar, contra pronóstico y con buen juego, la fase de grupos, dejando además a todos sus componentes un magnífico recuerdo.
Y ahora, visto lo visto, la temporada nos deja una pregunta abierta ¿Llegan nuevos tiempos a la Familia Monster?
La respuesta os la dejo a todos vosotros junto con la siguiente reflexión/propuesta: En los últimos años el equipo ha crecido, entre habituales y “auxiliares” hemos alcanzado un número casi excesivo para que, jugando en un solo equipo, todos podamos tener los minutos y la importancia que querríamos. Además, el nivel de juego dista mucho de ser homogéneo, lo que da lugar a distintas expectativas: Unos aspiran a conseguir buenas clasificaciones y pasar rondas en play off, aunque sea a costa de formar equipos con roles muy definidos, en los que unos pueden jugar más de treinta minutos mientras otros pueden llegar a no salir. Otros, por el contrario, buscan más disfrutar con el juego, repartiendo minutos entre todos, aun a costa de sacrificar una mejor clasificación. Y todos aspiramos a seguir siendo un grupo que se divierte estando juntos, que disfruta de una afición común como es el baloncesto y que le sirve como excusa para echarse unas risas tomando unas cervezas, jugando al poker o lo que se tercie.
Ante esta tesitura, se nos plantean (al menos) tres alternativas:
- La primera de todas y la más sencilla, es seguir con un solo equipo y con la misma filosofía del último año: Un equipo con entrenador, con una lista de fijos y otra de “auxiliares” (esos como Alex, Vito o Edu, que sólo van a los partidos en caso de necesidad por no haber gente suficiente un día) y pensado con el objetivo de ser primero de grupo y de competir por y para ello, sacrificando el reparto de minutos en busca de un mayor nivel deportivo. Dejando el espacio más lúdico exclusivamente para los jueves.
El “pero” en este caso, es claro, somos demasiados y no parece que haya minutos para todos, sobre todo teniendo en cuenta que sigue llegando gente. Además, esta opción ha dado lugar a malas caras en las dos últimas temporadas y a algunas discusiones y exclusiones que no son para nada deseables.
Las dos siguientes parten de un mismo presupuesto, dos equipos en los que se repartan las dos diferentes aspiraciones de que hablábamos antes, uno para ganar y el otro para jugar, uno con entrenador y roles definidos y el otro más “democrático” en el que los minutos estén más repartidos, basándonos en los equipos de este último Torneo Marca (Familia Monster y Los Monsters), e incorporando a otros como Pozo o Alex que no han estado disponibles en esta última temporada. Y ya dentro de este planteamiento, dos posibilidades:
- Inscribir dos equipos en distritos diferentes (Centro y Carabanchel) y con diferentes días de juego, uno los sábados por la tarde y el otro los domingos por la mañana, en los que inscribiríamos a todos los jugadores disponibles (en torno a 20-22, algo que está permitido al no tratarse del mismo distrito), de forma que los fijos del equipo “competitivo” figurasen como auxiliares en el “democrático” y viceversa.
El “pero”, que también lo tiene esta alternativa es que la mayoría no iríamos más que al partido de “nuestro” equipo (ir a dos conlleva problemas de tiempo y familiares), y aquellos para los que las cervezas y el compañerismo de después del partido es casi más importante que el propio partido, coincidiríamos mucho menos y nos perderíamos ese momento que, al menos para algunos, es parte consustancial de la Familia Monster.
- Inscribir a dos equipos en el mismo distrito y en el mismo turno de juego (previsiblemente en Centro los domingos por la mañana), con dos listas de jugadores diferentes (al ser el mismo distrito no sería posible repetir).
Esta última alternativa plantea el problema de que en algunos partidos nos podamos encontrar con escasez de jugadores y, por tanto, exige un mayor compromiso de todos, además de intentar implicar a algunos de los recientes fichajes del Torneo Marca. Pero, al menos en parte, soluciona el problema de la anterior, dado que no sería difícil coincidir los jugadores de ambos equipos para las cañas o para vernos jugar, dado que sería habitual la coincidencia o la proximidad de horarios.
A partir de ahora tenemos unos meses, hasta el inicio de la próxima liga para pensarlo, hablarlo y decidirlo.
Y después de este rollo que os he soltado, que mejor que poner un vídeo, que sé que muchos es lo único a lo que prestáis atención. Y esta vez un justo homenaje para el mejor jugador europeo de los últimos años, el mejor jugador blanco de la NBA desde Larry Bird y el MVP de las últimas finales, Monsters, para todos, ¡¡¡¡Dirk Nowitzky!!!!
Y después de este rollo que os he soltado, que mejor que poner un vídeo, que sé que muchos es lo único a lo que prestáis atención. Y esta vez un justo homenaje para el mejor jugador europeo de los últimos años, el mejor jugador blanco de la NBA desde Larry Bird y el MVP de las últimas finales, Monsters, para todos, ¡¡¡¡Dirk Nowitzky!!!!